SOCIEDAD
Por: Milonga Moli
ANO - Asunción. La cuestión es muy simple, Lugo es todo un semental, él es un predicador que se hizo político para conseguir minitas, y todo bien, por lo menos no la caretea como los otros de la iglesia de quienes ya no es chiste denunciar sus apetencias pedofílicas, pero volviendo al tema que concierne esta nota, todo empezó ante un análisis histórico marxista de las máximas autoridades del Paraguay. Según su línea de tiempo, luego de toda esta presidenciada de izquierda va a llegar una de derecha. Para nivelar un poco. Todo en orden.
Hasta que se emborracha el generalísimo que les va a tocar como presidente y se pelea con los de Argentina, el Brasil y Uruguay. Qué ocurre según un análisis crítico filosófico de lo que depara el futuro. Y seguro que esta guerra de la triple alianza versión siglo 21, con armas químicas compradas en China y EE.UU. les mata todos los hombres de vuelta.
¿Y cómo repoblar? ¿Quién se hará cargo de rehacer el país y coger con todas esas mujeres guaraníes?
No ha existido en la historia del país mediterráneo un tipo que coja y tenga más chicos que el actual presidente. Y creen, basados en la base de datos perteneciente a un espía que trabajabas para la ex KGB y ahora trafica faso en Juan Pedro Caballero, que no lo volverán a tener en tres siglos, ellos saben lo que es que un país quede diezmado y se quieren prevenir. El clon está conviviendo con Dolly, la oveja, para empezar su proceso de adaptación en la sociedad. Y claro, sin previsión por los científicos hace dos días que la oveja
está con la concha en hielo, ya que el mini-Lugo se la tiene jurada.
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